- Este artículo lo voy a dedicar a hacer algunas consideraciones con respecto al publicado en este mismo blog el pasado día 13 de agosto, cuyo título era: La FSSPX podría reconciliarse con Roma sin aceptar todo el Vaticano II
Cardenal Müller, Prefecto para la Doctrina de la Fe |
El martes 24 de mayo, Edward Pentin declaró en el National Catholic Register lo siguiente:
El cardenal Gerhard Müller dijo que espera que la FSSPX, que se opuso siempre a las declaraciones del concilio Vaticano II sobre libertad religiosa y ecumenismo, “reconozca 'sin reservas' la libertad de religión como derecho humano, y una obligación para el ecumenismo.” Podemos verlo en este video:
En una entrevista de la edición de junio de la publicación alemana Herder Korrespondenz, el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe dijo que si uno “quiere ser plenamente católico, debe reconocer al Papa y al Concilio Vaticano II.”
Según la entrevista, publicada el 24 de mayo en la página web católica de Austria, Kathpress, el cardenal Müller dijo que espera que se reconozcan todas las declaraciones del Concilio que tratan esos temas. (...)
Duración: 42 segundos
Según la entrevista, publicada el 24 de mayo en la página web católica de Austria, Kathpress, el cardenal Müller dijo que espera que se reconozcan todas las declaraciones del Concilio que tratan esos temas. (...)
El cardenal Müller, cuya insistencia a la FSSPX para que acate la enseñanza del concilio es claramente más pronunciada que la del Santo Padre, dijo a Herder Korrespondenz que uno no puede rebajar el Concilio a una “sencilla cháchara pastoral” sólo porque adoptó dogmas no vinculantes.
[En otras palabras, lo que pretende el cardenal Müller es una adhesión dogmática a un Concilio meramente pastoral, como es el Concilio Vaticano II, que así fue declarado expresamente por el papa Juan XXIII, quien fue su iniciador]
El prefecto de la CDF dijo que ningún Papa ha proclamado la Resurrección de Cristo como dogma [infalible] ex cátedra, y que sin embargo “se encuentra en el centro del credo, es su fundamento.”
[En otras palabras, lo que pretende el cardenal Müller es una adhesión dogmática a un Concilio meramente pastoral, como es el Concilio Vaticano II, que así fue declarado expresamente por el papa Juan XXIII, quien fue su iniciador]
El prefecto de la CDF dijo que ningún Papa ha proclamado la Resurrección de Cristo como dogma [infalible] ex cátedra, y que sin embargo “se encuentra en el centro del credo, es su fundamento.”
¡El cardenal Müller coloca las afirmaciones pastorales ambiguas, contradictorias y no infalibles del Vaticano II a la altura de la Resurrección de Cristo! La verdadera ironía es que no hay certeza aquí de que el cardenal Müller crea realmente en la Resurrección. Así, en su Katholische Dogmatik del 2010, dice Müller hablando sobre la Resurrección de Nuestro Señor:
“No debe decidirse aquí si la visita de las mujeres a la tumba durante la mañana de Pascua y el descubrimiento de que el cuerpo de Jesús no estaba allí fue un acontecimiento histórico tal como fue retratado. Es posible que esta [narración] refleje la veneración de la tumba por la comunidad de Jerusalén.” [¿Cogemos la onda?]
(...) ¿Cómo puede uno ser “católico” y no estar (...) en “plena comunión” con la Iglesia católica? Este pensamiento confuso ejemplifica el estado de la mente cuando comienza a aceptar las contradicciones del Concilio. Dado que, según el concilio Vaticano II, uno puede “subsistir” en la “Iglesia de Cristo” sin pertenecer a la Iglesia católica [Lumen Gentium, cap I, nº 8, párrafo 2º]. De esta forma, supongo que uno puede pensar que el obispo Fellay subsiste de alguna manera en la Iglesia católica pero que no posee aún “plena comunión” con ella. (...)
Finalmente, Pentin afirma el siguiente error:
El año pasado, el Papa hizo su primera propuesta a la Fraternidad, anunciando que las confesiones de la FSSPX serían válidas y lícitas durante y después del Año Jubilar de la Misericordia. Hasta entonces, Roma las consideraba canónicamente inválidas porque no tenían la jurisdicción necesaria.
Esto es muy interesante. Me gustaría pedirle al Sr. Pentin que cite el capítulo y el verso en el que Roma afirmó pública y oficialmente que las confesiones de la FSSPX eran “canónicamente inválidas”. Roma jamás lo hizo.
[Esto responde ya, de alguna manera, a la pregunta que yo me hice, en el post anterior, cuando afirmaba que las confesiones de los sacerdotes de la FSSPX son válidas: Nunca han sido invalidadas oficialmente por Roma. De modo que no tiene mucho sentido decir, por parte del papa Francisco, que dichas confesiones sí serían válidas durante el año jubilar de la misericordia ... de momento, puesto que ya lo eran antes de que él lo dijera]
[Esto responde ya, de alguna manera, a la pregunta que yo me hice, en el post anterior, cuando afirmaba que las confesiones de los sacerdotes de la FSSPX son válidas: Nunca han sido invalidadas oficialmente por Roma. De modo que no tiene mucho sentido decir, por parte del papa Francisco, que dichas confesiones sí serían válidas durante el año jubilar de la misericordia ... de momento, puesto que ya lo eran antes de que él lo dijera]
En cuanto a un acuerdo potencial entre la Fraternidad y Roma, finalizaré trayendo a colación la reciente y brutal opresión de los Frailes Franciscanos de la Inmaculada bajo el papado de Francisco, y las implicaciones que esto puede tener sobre una Fraternidad regularizada.
Presentaré las mismas reservas sobre la estructura canónica que el obispo Fellay dio al cardenal Castrillón Hoyos en el año 2001. Como recuerda el obispo Fellay:
Entonces dije estas cosas al Cardenal y luego él dijo, “Así que, esto es lo que Roma le propone: queremos una solución en la que podamos resolver el problema de los obispos, obispos que serían ordinarios, es decir, obispos verdaderos, quizás incluso con diócesis, sacerdotes y fieles.” Luego habló sobre un arreglo como el del Opus Dei, es decir una Prelatura personal. Él anticipó nuestra dificultad con que sea el Papa quien elija el obispo que encabezará esta prelatura personal, dado que este es el procedimiento habitual. Él dijo que los sacerdotes de la Fraternidad o los obispos de la Fraternidad debieran proponer tres nombres al Papa cada vez que necesiten otro obispo para la Tradición … Uno de mis argumentos fue: “No confiamos en ustedes. Usted es muy amable en lo que dice, pero no confiamos en ustedes.
La pregunta es: una vez que la FSSPX sea regularizada y tenga estructura canónica bajo Roma, ¿Qué posición podrá tener para oponerse a una autoridad romana que insiste en que acepte las controvertidas novedades del Concilio? A esa altura, ¿no podrían Francisco, Pozzo, o Müller, exigir a la FSSPX que acepte, bajo obediencia, el ecumenismo y la libertad religiosa?
Chris Jackson