En la nota de prensa, que transcribo íntegramente más abajo, se especifica que las modificaciones de esta nueva edición, y en especial la hasta ahora polémica traducción del "Pro multis" de la consagración, se cambia, por mandato de la Santa Sede, para ajustarla a la versión oficial en latín. Lo que no dice la nota de prensa es que dicho original en latín transcribe literalmente las palabras de Nuestro Señor tal y como reflejan los Santos Evangelios; es decir, a partir de ahora no se dirá "por muchos" en lugar de "por todos los hombres" -como se ha dicho en las últimas cuatro décadas- por decisión del Vaticano, sino porque así lo dijo Nuestro Señor.
En España han tenido que pasar diez años después de que S. S. Benedicto XVI mandara traducir correctamente el "pro multis" en la fórmula de la Consagración -aprobó el decreto el 17 de octubre de 2006-, y más de un año después de que el Papa Francisco utilizara dicha fórmula en español, siendo así el primer Papa de la Historia en hacerlo (ver aquí).
El Mensaje de la Comisión Episcopal de Liturgia reconoce, además, que la expresión hasta ahora en uso -"por todos los hombres"- no era realmente una traducción del texto, sino una interpretación, explicable en el clima de los primeros años de la reforma litúrgica aunque, a continuación, explica de manera poco clara que en la fórmula de la consagración el "por vosotros" se proyecta sobre el "muchos" de manera inmediata y, ciertamente, está abierto a "por todos los hombres", haciendo caso omiso de la explicación dada por el Sacrosanto y Ecuménico Concilio de Trento y por S. S. Benedicto XVI -al que sólo remiten en una nota al pie-, sin explicar que, en realidad, la fórmula no hace alusión a para quiénes está abierta la Redención -que es a todos los hombres- sino a quiénes va a aprovechar, es decir, a quiénes se les van a perdonar los pecados.
Las propias palabras de Nuestro Señor no dejan lugar a dudas: "...que por vosotros y por muchos será derramada en remisión de los pecados". No dice simplemente a quién se dirige la Salvación, sino a quiénes aprovechará, pues ésta no es automática, sino que requiere la cooperación y aceptación voluntaria por parte de cada persona. Con esta omisión en su explicación, la Comisión de Liturgia de la CEE parece querer ocultar este hecho, que no es sólo una cuestión lingüística, como parece querer dar a entender, sino principal y fundamentalmente teológica.
Aquí está la Nota de Prensa de la CEE (las negritas son mías):
En la mañana de hoy se presenta en el Salón de la Plenaria de la Conferencia Episcopal (CEE) la 3ª edición del Misal Romano en castellano. Intervienen en el acto Mons. Carlos Osoro, vicepresidente de la CEE, Mons. Julián López, presidente de la Comisión de Liturgia, José María Gil, Secretario General de la CEE, Luis García, director de la Comisión de Liturgia y Manuel Fanjul, director general de publicaciones de la CEE.
El texto de la edición que ahora se presenta es el resultado de un largo trabajo de revisión y actualización y obtuvo la aprobación de la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española el 21 de abril de 2010. El pasado 8 de diciembre de 2015 la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos confirmaba este texto en lengua española para España de la tercera edición del Misal Romano.
El Misal Romano es uno de los libros litúrgicos más importantes de la celebración de la Iglesia, texto indispensable para la celebración de la Sta. Misa. En él, la parte fundamental está compuesta por las oraciones que se necesitan para la celebración de la Eucaristía, pero, además, se describen los ritos que se desarrollan durante la misma (gestos, movimientos, posturas, etc…) y quiénes intervienen en cada ocasión (celebrante, concelebrante, acólito, lector, salmista…).
Tanto las oraciones como los ritos contenidos en el misal actual son herencia de la larga historia litúrgica de la Iglesia en sus diversos tiempos, momentos, sensibilidades espirituales y acentos teológicos.
La tercera edición del Misal Romano es la continuadora de las otras dos publicadas después del Concilio Vaticano II (en el año 1970 y 1988 respectivamente) y se sitúan en línea de continuidad con ellas. No obstante, la presente edición significa un notable enriquecimiento en relación a las precedentes; en efecto, la tercera edición ofrece una traducción al castellano con abundantes cambios de expresión, retoques, precisiones; todo ello para preservar la fidelidad al texto latino original del año 2008. Así mismo, también se ha enriquecido las rúbricas para facilitar su comprensión y desarrollo dentro de la celebración.
Por decreto del presidente de la Conferencia Episcopal Española esta edición del Misal entrará en vigor a partir de las misas vespertinas del domingo I de Cuaresma próximo (el sábado 4 de marzo de 2017), y su uso será obligatorio a partir de ese momento en todas las misas que se celebren en lengua española en las diócesis de España, no pudiendo usarse antes. Estas medidas vienen dadas por el hecho de que, como es sabido, y por mandato de la Santa Sede, se modifica la fórmula de consagración del cáliz.
Pese a que aún faltan unos meses para dicha entrada en vigor, ante la expectativa sobre este libro y para facilitar la mayor difusión posible, se comenzará a servir a distribuidores y librerías tras las celebración de las Jornadas Nacionales de Liturgia que tendrán lugar en Madrid a finales del presente mes de octubre.
La nueva edición del Misal, de similares características a los nuevos leccionarios en cuanto a su maquetación, encuadernación y protección, tiene un formato de 210×275 mm y 1386 páginas. Va acompañado para su venta, conjunta e inseparablemente, de un apéndice de 96 páginas para la celebración de la Misa en latín, y un estuche con un triple CD que contiene la ilustración sonora de todos los textos musicalizados del Misal.
Nota de prensa de la Presentación de la 3ª edición del Misal Romano en castellano
En la mañana de hoy se presenta en el Salón de la Plenaria de la Conferencia Episcopal (CEE) la 3ª edición del Misal Romano en castellano. Intervienen en el acto Mons. Carlos Osoro, vicepresidente de la CEE, Mons. Julián López, presidente de la Comisión de Liturgia, José María Gil, Secretario General de la CEE, Luis García, director de la Comisión de Liturgia y Manuel Fanjul, director general de publicaciones de la CEE.
El texto de la edición que ahora se presenta es el resultado de un largo trabajo de revisión y actualización y obtuvo la aprobación de la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española el 21 de abril de 2010. El pasado 8 de diciembre de 2015 la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos confirmaba este texto en lengua española para España de la tercera edición del Misal Romano.
El Misal Romano es uno de los libros litúrgicos más importantes de la celebración de la Iglesia, texto indispensable para la celebración de la Sta. Misa. En él, la parte fundamental está compuesta por las oraciones que se necesitan para la celebración de la Eucaristía, pero, además, se describen los ritos que se desarrollan durante la misma (gestos, movimientos, posturas, etc…) y quiénes intervienen en cada ocasión (celebrante, concelebrante, acólito, lector, salmista…).
Tanto las oraciones como los ritos contenidos en el misal actual son herencia de la larga historia litúrgica de la Iglesia en sus diversos tiempos, momentos, sensibilidades espirituales y acentos teológicos.
La tercera edición del Misal Romano es la continuadora de las otras dos publicadas después del Concilio Vaticano II (en el año 1970 y 1988 respectivamente) y se sitúan en línea de continuidad con ellas. No obstante, la presente edición significa un notable enriquecimiento en relación a las precedentes; en efecto, la tercera edición ofrece una traducción al castellano con abundantes cambios de expresión, retoques, precisiones; todo ello para preservar la fidelidad al texto latino original del año 2008. Así mismo, también se ha enriquecido las rúbricas para facilitar su comprensión y desarrollo dentro de la celebración.
Por decreto del presidente de la Conferencia Episcopal Española esta edición del Misal entrará en vigor a partir de las misas vespertinas del domingo I de Cuaresma próximo (el sábado 4 de marzo de 2017), y su uso será obligatorio a partir de ese momento en todas las misas que se celebren en lengua española en las diócesis de España, no pudiendo usarse antes. Estas medidas vienen dadas por el hecho de que, como es sabido, y por mandato de la Santa Sede, se modifica la fórmula de consagración del cáliz.
Pese a que aún faltan unos meses para dicha entrada en vigor, ante la expectativa sobre este libro y para facilitar la mayor difusión posible, se comenzará a servir a distribuidores y librerías tras las celebración de las Jornadas Nacionales de Liturgia que tendrán lugar en Madrid a finales del presente mes de octubre.
La nueva edición del Misal, de similares características a los nuevos leccionarios en cuanto a su maquetación, encuadernación y protección, tiene un formato de 210×275 mm y 1386 páginas. Va acompañado para su venta, conjunta e inseparablemente, de un apéndice de 96 páginas para la celebración de la Misa en latín, y un estuche con un triple CD que contiene la ilustración sonora de todos los textos musicalizados del Misal.
CATHOLICVS
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