Cualquier maldad que hoy se ha impuesto sobre la Tierra está debidamente pensada, planeada y puesta en marcha en pequeños pasos capaces de mentalizar a la población de que algo malo, es, no sólo bueno, sino necesario y debe ser elevado a categoría de derecho (...)
- Para ello se hace incidencia en casos emotivos tangibles, testimonios que conllevan un sufrimiento:
Madre soltera.
Feto con defectos genéticos.
Peleas en el matrimonio y sufrimiento acarreado en los niños.
Amor coartado por falta de libertad sexual de los jóvenes, ...
- A la vez, se enfatizan las enfermedades de transmisión sexual/riesgo de embarazo para tramposamente insistir en:
Anticoncepción.
Uso de condones.
Vacunas peligrosas.
Aborto, ...
- O también en el divorcio, por ejemplo, para destruir el matrimonio y la familia.
- A estas dictaduras colectivas se podrían añadir otras cuestiones como:
El cambio climático.
La necesidad de la vigilancia masiva y del acopio de datos personales.
La guerra de sexos, etc ...- Esta verdadera campaña de lavado de cerebro necesita llegar a todos los habitantes del planeta y cuanto antes mejor. Para ello se mangonean los currículos escolares para la aceptación:
Ya sea del independentismo a través del rechazo a la patria.
De la homosexualidad y demás perversiones.
O para menoscabar la autoridad paterna, etc.Los medios de comunicación masiva, a disposición de los violadores de la Ley de Dios, son primordiales para repetir el mensaje falaz que excusa, de mil modos, el mal, hasta que la gente ha absorbido la manipulación por repiqueteo incesante.
La misma élite corruptora de las almas, está ahora dirigiendo la Iglesia Católica, secuestrada por herejes homosexualistas y profanadores del Cristo Eucarístico, y del sacerdocio que confiere al ordenado ser otro Cristo.Antes que en el catolicismo, las serpientes demoníacas entraron en las denominaciones protestantes llegando a lo que ocurre actualmente: que "obispas" lesbianas vengan a ser cabezas de sus "iglesias" o se "case" a parejas del mismo sexo en sus edificios ... algo que empieza a pasar en algunas parroquias católicas tomadas por estos infiltrados.