Esto está en consonancia con la homilía del Papa en Santa Marta el 10 de octubre. En el siguiente video puede escucharse un resumen de lo más importante que dijo. Contiene un comentario personal
Duración 1:19 minutos
Ecco allora come la Scrittura parla anche all’uomo di oggi. Ha spiegato Francesco: «I testardi di anima, i rigidi, non capiscono cosa sia la misericordia di Dio. Sono come Giona: “Dobbiamo predicare questo, che questi vengano puniti perché hanno fatto del male e devono andare all’inferno». I rigidi, cioè, «non sanno allargare il cuore come il Signore. I rigidi sono pusillanimi, con il piccolo cuore chiuso, attaccati alla nuda giustizia». Soprattutto, ha aggiunto, i rigidi «dimenticano che la giustizia di Dio si è fatta carne nel suo Figlio, si è fatta misericordia, si è fatta perdono; che il cuore di Dio è sempre aperto al perdono. Di più, dimenticano quello che abbiamo pregato la settimana scorsa nell’orazione colletta: dimenticano che Dio, la sua onnipotenza, si manifesta soprattutto nella misericordia e nel perdono».
Comentario personal contenido en este vídeo:
El papa Francisco habla como si el infierno no existiera; y no existiera para nadie. Y quien piense de otro modo es un alma rígida y que no tiene misericordia. No deja de ser curioso, por no decir otra cosa, que hablando de este modo, está contradiciendo al mismo Jesucristo, a quien está llamando rígido. Cierto que a nadie le gustaría ir al infierno. Eso es absurdo pensarlo, lo cual no quita que la existencia del infierno sea una verdad de fe ... no porque lo diga yo, que no soy nadie, sino porque así lo dijo Jesús y porque así se ha dicho siempre a lo largo de casi dos mil años de historia del Cristianismo. Por otra parte, si Francisco ha dicho: ¿Quién soy yo para juzgar? ... ¿por qué se dedica a juzgar precisamente a aquellos que intentan vivir conforme a las enseñanzas del Señor?
José Martí