Las cuarenta contemplativas de las Pequeñas Hermanas de María, Madre del Redentor, asentadas en Saint-Aignan-sur-Roe (Francia), son perseguidas por su obispo liberal Thierry Scherrer de Laval, informa el 27 de febrero la página web riposte-catholique.fr.
Las Hermanas administran cuatro hogares para ancianos y anteriormente sirvieron también en la casa del obispo. Scherrer considera que las Hermanas son “demasiado tradicionales”. Él está especialmente irritado por el hecho de que ellas, durante su capítulo general celebrado en el 2012, decidieron volver al viejo hábito.
A causa de una fusión de los hogares de ancianos de las Hermanas, ahora Scherrer es miembro de la junta de gobierno de la asociación civil que administra esos hogares. Sin experiencia en el tema él impuso decisiones administrativas sin escuchar el consejo de ningún experto. Al verse enfrentado con la resistencia de las Hermanas ordenó una visita canónica, cuyos resultados fueron decididos de antemano.
Scherrer consiguió involucrar a la Congregación vaticana para los Religiosos, que suspendió el Concejo de las Hermanas y exilió a la superiora general y a la maestra de novicias de la comunidad. Fueron impuestos tres comisionados apostólicos liberales.
Pero las Hermanas se negaron a recibir a los comisionados y apelaron en la Signatura Apostólica romana contra las medidas tomadas contra ellas.