“Lo que el Papa ha dicho sobre no saber nada es mentira”, ha respondido el arzobispo Viganò desde su paradero desconocido al portal LifeSiteNews. “Finge no recordar lo que le dije sobre McCarrick, y finge que no fue él quien me preguntó por McCarrick en primer lugar”.
Así responde Carlo Maria Viganò, autor de un tumbativo testimonio que conmocionó al mundo católico y dejó literalmente sin palabras a Su Santidad, a la entrevista concedida por el Papa a la cadena mexicana Televisa, en la que negó tener la menor idea de las andanzas homosexuales y abusivas del ex cardenal Theodore McCarrick, ahora secularizado, y cargó contra el arzobispo que en su documento sostenía lo contrario.
Desgraciadamente para la versión de Su Santidad, el mismo día en que se publicaba en Vatican News la transcripción de la entrevista, la revista Crux informaba de correspondencia filtrada entre el Papa, el secretario de Estado Pietro Parolin y el entonces cardenal que confirma la existencia de sanciones privadas impuestas al ex arzobispo de Washington por el Vaticano en 2008, y que McCarrick viajó por todo lo largo y ancho del globo durante el pontificado de Francisco desempeñando un papel clave para llegar al polémico pacto secreto entre la Santa Sede y el gobierno comunista chino.
Tampoco ayuda a la credibilidad del Santo Padre que, en la citada entrevista, parezca ignorar sus propias diatribas contra la maledicencia para atribuir a un juicio civil sobre una herencia la ‘prueba’ de que Viganò no es creíble en lo que dice.
“El trabajo lo hicieron ustedes, sobre eso fue genial, y me cuidé muy mucho de decir cosas que no estaban ahí pero después las dijo, tres o cuatro meses después, un juez de Milán cuando lo condenó”, afirma, sorprendentemente, el Papa en la entrevista, relacionando extrañamente el trivial lío de herencias con la veracidad del testimonio del ex nuncio en Estados Unidos. Y añade: “Me callé, para que voy a ensuciarlo. Que los periodistas encuentren la cosa. Y ustedes lo encontraron, encontraron todo ese mundo. Fue un silencio de confianza hacia ustedes, más aun, esa es una de las razones, dije: “Acá tienen, estúdienlo, esto es todo”. Y el resultado fue bueno, fue mejor que si yo me pusiera a explicar, a defenderme… Ustedes juzgaron con las pruebas en la mano”.
Carlos Esteban