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martes, 8 de abril de 2025

¿«Todos, Todos, Todos»?, El Mantra que se incumple en Alemania. Sacerdote tilda de “Nazi” a monaguillo y lo echa por poner en su estado de WhatsApp foto con líder de partido AfD



Esta información nos ha interesado por el hecho de que los simoniacos obispos alemanes han encontrado otra forma de excluir de su selecto grupo no solamente a los que no les sostienen sus holganzas y extravíos por medio del impuesto eclesial, sino también a los que ellos han dado de llamar “Nazis”, con cualquier justificación, incluso la más rebuscada, como la del ejemplo a continuación. Lea y entienda que aquello de “todos, todos, todos” es un simple slogan barato para mercadear un cierto tipo de Iglesia en donde precisamente no se acepta a todos, sino a los de prosapia similar. Y ahora que nos referimos a Alemania, lo que aquí aparece se parece mucho a un cierto pasaje que describía Ana Catalina Emmerick en sus visiones y revelaciones.

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Continúa el cordón sanitario contra el partido soberanista Alternativa para Alemania (AfD, por sus siglas en alemán), ahora también en el sector eclesiástico. En la localidad bávara de Teisnach, un joven monaguillo de 16 años ha sido apartado de sus funciones por su propio párroco después de que saliera a la luz una fotografía en la que aparece junto al eurodiputado de AfD Maximilian Krah.

El adolescente, que llevaba nueve años como monaguillo y era considerado un ejemplo dentro de su parroquia, compartió la imagen en su estado de WhatsApp tras asistir, por iniciativa propia, a varios actos políticos antes de las elecciones, entre ellos uno de AfD. A raíz de esa foto, el sacerdote lo convocó a una conversación privada en la que, según ha relatado la familia, llegó a llamarlo «nazi» y lo expulsó como monaguillo principal.

El joven no milita en ningún partido, pero eso no ha evitado que se le castigue por aparecer con un político de una formación legítima y con representación democrática. Para su familia, el episodio ha sido un mazazo. En una carta abierta, han expresado su tristeza e incomprensión, recordando que el chico incluso había manifestado interés en el sacerdocio.

Desde el obispado de Passau se ha confirmado el caso y se han limitado a recordar que la Iglesia «defiende el orden democrático y libre». Para justificar la medida, han citado una declaración de la Conferencia Episcopal Alemana de febrero de 2024 que afirma que «el nacionalismo étnico y el cristianismo son incompatibles«.

Krah también ha denunciado lo ocurrido en su cuenta en X, donde ha lamentado lo ocurrido y ha asegurado que intentará ponerse en contacto con el joven. «La Iglesia alemana del impuesto eclesiástico ha sido durante mucho tiempo postcristiana y a menudo anticristiana. El niño ahora está aprendiendo esto a las malas. Espero que esto fortalezca aún más su fe. Intentaré ponerme en contacto con él», ha afirmado.

Como ha señalado el político de AfD, lo ocurrido trasciende la anécdota y refleja una tendencia en ciertas estructuras de la Iglesia en Alemania, donde parece pesar más la vigilancia sobre las ideas políticas de los fieles que la misión de formar en la fe. El mensaje que se percibe es claro: si simpatizas con posturas que se salen del marco ideológico aceptado, puedes acabar señalado, incluso dentro de tu propia parroquia.